Esperando nuevos héroes

Corren tiempos de miradas ciegas,
de oídos envasados al vacío,
de palabras que cosen cortinas de humo,
tambores tocando sonatas de guerra,
 egos ahogados sobre sí mismos,
y gente con hilos movidas de un lado para otro.

Un momento...
no son tiempos modernos,
por mucho que nos empeñemos en ser buenos hipsters,
vestir a la última y presumir de ropero,
de tener la tecnología más avanzada,
de vivir y ser comodidad absoluta,
no,
son tiempos de ancla oxidada,
muelles viejos camuflados,
revestidos con restos de patrones ancestrales,
mismas luchas con calendarios diferentes.

Luchas de poder,
de fronteras,
de demostrar que suela de bota esta por encima,
de razas superiores,
de catálogos de armas silenciosas,
que disparan sin ruidos pero que matan igual.

Tiempos que se repiten en la historia,
esa historia humana,
que por cabezonería,
 nos empeñamos en repetir una y mil veces.

Mientras, los futuros héroes,
 piensan si es mejor  crecer para salvarnos,
o   ver que escondite es mejor para que no sean descubiertos,
y así mientras,
 dejarnos rodar en  esta indolente torpeza.