Flor enrejada

Una semilla brotó distraida,
por mirar al sol perpleja,
se desvió,
creció en contraposición a la mayoría de su especie.

Todo el mundo la miraba con desgana,
algunos con pena ,
otros con asco,
otros no miraban si quiera.

La flor no entendía,
ella se sentía viva,
espléndida por dentro,
con ganas de mirar las estrellas,
el firmamento infinito,
infinito como su interior.

Presente  lejano ,
tiempos pesados,
futuro incierto.
Pasaban los años y los demás seguían sin entender su forma,
rompía los parámetros de belleza,
de normalidad establecida.

.
La semilla cada vez quería saber más,
quería reír,
sentir como los demás,
llorar a deshoras,
y no por horas.
Poder mostrar lo que tenía para regalar a los demás.

Nadie la hacia caso,
alguna mirada de vez en cuando y poco más,
nadie se paraba en su  esplendor único.
En esa distinción que podría marcar el camino a otros iguales.

Poco a poco
fueron apartándola ,
encerrada en una maceta gris,
en  rincón oscuro y desgastado.
Castigada del sol ,
y con la única compañía de una débil bombilla
casi sin chispa para alumbrar.
Apartada de los demás por una reja,
 separaba el aliento de libertad y esperanza,
con llantos de angustia infinita.

Luchando cada día
para ser vista y acogida por los demás,
y sentirse visible
en un mundo de miradas tapadas.


Pd: Inspirada por la película  " Life feels good "
 (Un luchador de alma silenciada)