Entre líneas

Desde el principio quiso marcar la diferencia,
líneas verticales limitando el haz de luz,
luz concentrada,
jugo de letras a exprimir.
Decidió estar presente,
por nada perdería este momento único,
preparativos para el mayor atentado que la humanidad vería,
matar la somnolencia reinante.
Seres dormidos con ojos despiertos,
no lúcidos,
anestesiados,
atrapados por los cantos de sirena.
Pantallas pequeñas con magnetismo sicópata,
Ulises lo aviso,
desviar la atención para no caer en sus redes,
y caímos,
nadie quiso ser avisado.
Nos bañamos cada día en sus aguas de redes turbias,
y no nos importa el fango de desgana,
cabezas gachas,
dedos estresados,
y un horizonte cada vez más perdido y desfigurado.
Pequeño foco,
silencio de la oscuridad,
fiel sombra del que escribe,
 iluminar consciencias,
la suya propia,
aun zigzaguente,
en los mares revueltos de la inercia,
siempre primero uno,
después el resto.
Dirigir el haz de luz,
quedarse entre líneas,
y que la imaginación haga el resto...