1974

Es el destino siempre el que marca los actos, es él quien delante de mis ojos pone esta fecha, justo este 8 de marzo.
Será pues porque en ese año, fue el último ejecutado en garrote vil en España, Salvador Puig Antic, o quizá me quiere mostrar otro acontecimiento, la muerte de Oscar Schindler, industrial y hombre de negocios alemán que salvó a unos 1.200 judíos del Holocausto Nazi, o a lo mejor me quieren recordar la dimisión del presidente Nixon en U.S.A. , no, no creo que el azar sea tan escrupuloso en los detalles, no, ya sé, la inspiración parece llamar a mi mente y me lleva hasta  el Gran Valle del Rift, concretamente en el triángulo de Afar (Etiopía), donde el paleoantropólogo estadounidense Donald Johanson encuentra los restos fósiles de Lucy, una mujer adulta de la especie Australopithecus afarensis. Fue el primer hallazgo de una humanoide bien conservado que explica el nexo entre primates y humanos.
No, no es eso precisamente lo que me quieren mostrar, pero me gusta el nexo de unión con la fecha y con el nombre de Lucy. Será porque mi madre se llama así, o porque justo al lado de este restaurante de fecha cuarentona pasaron miles de Lucys juntas, mujeres que ardían de entusiasmo, ganas e ilusión, que como ese hallazgo, forman ya parte de la historia. Marcando un punto de inflexión en la consciencia colectiva.
 Romper definitivamente las cadenas, y enterrar profundo el agobio del no reconocimiento y la desigualdad para, de una vez por todas, mirarnos a los ojos como personas libres, sin ningún condicionante.